La forma en que vivimos y consumimos tiene un gran impacto en nuestro planeta. Si comprendemos cuánto tiempo tardan en descomponerse los materiales que desechamos a diario, es probable que entendamos la importancia de separarlos en origen. Este simple acto permite que sean reciclados y ayuda a reducir la cantidad de residuos enviados a basurales a cielo abierto o rellenos sanitarios. Al tomar conciencia de este proceso, podemos contribuir a la protección del ambiente y la sostenibilidad.

La pregunta entonces es: ¿sabés cuánto tardan en degradarse los residuos que generás? La respuesta puede sorprenderte. Una bolsa de plástico, por ejemplo, tarda entre 100 y 500 años en descomponerse, mientras que una botella de vidrio puede permanecer intacta durante miles de años. Un cartón tarda alrededor de 2 meses en degradarse, y un pañal desechable demora hasta 500 años.

Estos ejemplos nos muestran la importancia de ser conscientes de nuestros hábitos diarios y de tomar medidas para reducir nuestro impacto ambiental. Compartimos algunas acciones que podés tomar para ser parte del cambio.

  1. Evitá productos no ecológicos: optá por bolsas de tela, botellas de vidrio y productos de cartón en lugar de plástico. Estas opciones no solo son más sostenibles, sino que también pueden ser reutilizadas.
  2. Reducí tu consumo: pensá en el impacto que tiene cada compra. Si no necesitás algo, no lo compres. Recordá: el mejor residuo es el que no se genera.
  3. Reutilizá: en lugar de tirar objetos que ya no necesitás, intentá reutilizarlos o darles una nueva vida. Por ejemplo, podés convertir una botella de vidrio en un jarrón para plantas o una lata de conservas en un lapicero.
  4. Separá y reciclá: asegurate de separar los residuos en un contenedor diferenciado para reciclar. Esto incluye papel, cartón, vidrio, plástico y otros materiales que pueden ser reutilizados y reinsertados en el circuito productivo como materia prima.
  5. Educación y conciencia: Compartí tus conocimientos con amigos y familiares. La conciencia colectiva es clave para crear un cambio significativo.
  6. Apoyá a empresas sostenibles: buscá empresas que promuevan prácticas sustentables y elegilas al momento de comprar. Tu decisión es una herramienta poderosa para influir en la industria y que cada vez tengan prácticas más responsables y sostenibles.
  7. Creá el hábito del reciclaje: incorpora el reciclaje en tu rutina diaria. Llená los contenedores de reciclaje regularmente y asegúrate de que los residuos estén limpios y secos.

Cada acción, por más pequeña que sea, contribuye para  hacer una diferencia y construir un futuro más sostenible.